Durante éste 2011, en el Super Bowl más precisamente, aparecieron varios comerciales pertenecientes a Coca-Cola, la ultra "soda" internacional que es súper chidísima en cualquier país, éste comercial lleva por nombre "Border", donde se cuenta la historia de dos "soldados", cada uno apiñado en su lado de la barricada, lado que cuidan celosamente del "enemigo" de enfrente, hasta que el santo rojo (¿coincidencia?) decide refrescarse tomando un poco de "Coca", pero como al señor le da lástima su gordito compañero decide darle un poco, pero... ¡Ah!, la santa barricada no les permite pasar para que se la entregue, por lo tanto opta por poner la Coca en el piso para luego redibujar una línea y así su compañero de armas pueda tomarla, amable el hombre.
El comercial termina como todos los demás, con alguien tomando Coca y un mensaje para hacer alusión (¿lo necesitan?) de que bebas Coca, en éste caso "open happines".
¿Resultó? Probablemente tenga los mejores comerciales dentro de la industria de la "soda", comparada claro con su azul competencia. Sin embargo, en mí no resulto efectivo. En toda la historia de los comerciales de la Coca sólo hubo uno que en verdad me inspiraba a tomarla, uno que de verdad sentía se identificaba conmigo, cosa que los diseñadores malvados detrás de esta mercadotecnia tienen como meta; dicho sagrado comercial es el de los "Insultos", estrenado algunos años, muchos, atrás, lo recuerdo sobre todo de mi "adolescencia" (la cual, mentalmente aún conservo) cuando causo gran impacto sobre mí y mis amigos, y cada que tomábamos soda recitábamos la frase célebre... "Está de poca madre".
Revisando los dos comerciales no puedo evitar, como se demuestra arriba, cargarme para el lado que más me gusta, en este caso el comercial de los insultos, que en México causo gran revuelo según lo que platiqué (en ese entonces) y actualmente con mis conocidos.
¿Por qué es más entretenido escuchar a unos adolescentes decir "de poca madre"? En mi caso por la realidad que representaba, en esa etapa de mi vida, por la cual casi la mayoría termina pasando profundamente, estaba estrenando mi lenguaje "regional", en donde no podía decir una palabra sin dos majaderías para acompañarla. Quizás debido a todo lo anterior que causara tanto impacto en mi vida, porque me parecía algo que demostraba tal y cual la realidad, algo "naturalista" como se podría clasificar, por ponerle un nombre; algo que a mi siempre me agrado. Pero, por el otro lado, el comercial donde dejan de ser enemigos para tomar soda... es por demás fantasioso, nunca de los nunca, por ejemplo, el reportero que le aventó los zapatos a Bush (¡bien por ti amigo! te envidio tanto...) hará las paces con dicho presidente a cambio de una soda... quizás por unas acciones de la compañía, pero nunca por una soda, y menos de algunos cuantos mililitros.
Coca-cola ha tenido mejores comerciales que éste, evidentemente, al menos para mí, que siempre preferiré un comercial "de poca madre", a uno bélico de sentido imposible.
¡¡¡Diviertanse un rato!!!
¿A poco no la vida es de "poca madre"?
Gaboh Pérez
Medios de Comunicación
4to semestre
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